No entiendo por qué no puede ser de los vecinos.
Ah, sí. Porque este es el mundo de los seres humanos.
El otro día encontré una imagen que describe un poco esta naturaleza:
Si sólo hubiese dos hombres, serían Rómulo y Remo, serían Caín y Abel.
¡Mamá! ¡Este mundo no me gusta! ¡Está lleno de heraldos del latrocinio!